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cuento de la tetera

Soy una Tetera y te lo cuento

En La Tetera de Arganda nos gustan los cuentos, las historias, las experiencias que nos hacen vivir bellos momentos de la vida, nos hacen aprender, muchas veces nos muestran el camino a seguir y otras veces nos hacen comprender las cosas o poder enseñar a los más pequeños situaciones algo mas complejas para ellos de una forma sencilla y divertida.

Pueden ser historias inventadas o reales, pero lo importante es que cuando las escuches, se mueva algo en tu interior, los cuentos nos pueden estimular los pensamientos, enriquece nuestro lenguaje. Suelen ser cortos, con un número determinado de personajes y de un argumento sencillo.

Todos estos ingredientes, como si se tratará de preparar un plato exquisitos, lo podemos encontrar en este hermoso cuento de La TETERA que escribió Hans Christian Andersen a mediados del sigo XIX, famoso también por otros cuentos como El Soldadito de Plomo, La Sirenita, La Cerillera o El Patito Feo, todos ellos cargados con un gran mensaje y que ha todos nos ha conmovido en un momento de nuestras vidas al leerlos. DISFRUTARLO.

La Tetera de Arganda

La Tetera

» Hace mucho tiempo había una antigua tetera de porcelana, muy costosa y elegante, que encabezaba el juego de té en todas las celebraciones importantes de la familia a la que pertenecía.

Tanta importancia la había vuelto vanidosa, y solía enorgullecerse de su alta estatura y su largo y estilizado pico ante las pequeñas y tímidas tazas o ante la modesta jarrita de la leche. Aunque solía aburrirlos a todos con sus aires de princesa, cada uno sabía que no era mala en el fondo y sospechaba que debía sentirse triste y vacía, pues siempre la guardaban aparte, en una repisa de vidrio para protegerla de los golpes.

Un día sucedió algo terrible: la señora contratada para servir el té en una elegante recepción de la familia, tropezó y cayó al suelo aparatosamente justo cuando llevaba la tetera en la mano. La tetera salió dando vueltas por el aire y cayó a varios metros de distancia. Cuando fueron a recogerla, notaron que se le había partido el pico y tenía una ancha rajadura de un lado a otro.

La vida de la tetera cambió desde entonces, pues sus dueños desistieron de repararla y se la regalaron a la misma señora que la había dejado caer. La señora, agradecida, se la llevó para su casa, sin saber muy bien qué hacer con ella. No podía utilizarla como tetera, pues el té se escapaba por las grietas del pico y la barriga como si se tratara de una regadera; tampoco podía usarla como florero, por la misma razón, y estaba demasiado desportillada para servir de adorno en la modesta sala. Ya la iba a tirar a la caneca, cuando se le ocurrió que podría servir como maceta en el patio.

Fueron tiempos muy duros para esta antigua princesa que había vivido solo para ser bonita y lucir siempre bien presentada, sin la menor idea de lo que significaba pasarla mal, como ahora que vivía a la intemperie y nadie se fijaba en ella. Allí empezó para ella una vida mejor. La llenaron de tierra y en ella pusieron un bulbo y lo regalaron. Y ese bulbo se convirtió en su corazón, un corazón vivo, algo que nunca había tenido. Desde entonces hubo vida en ella, fuerza y energía. El bulbo germinó y nació una flor que crecía asomando sus ramas por su pico roto. La vio y se olvidó de sí misma ante la belleza que nacía de su interior. ¡Dichoso el que se olvida de sí por los demás!.

Pero un día oyó decir a alguien que esa bella flor, se merecía una maceta mejor. Cómo la dolió, y la flor fue trasplantada a otro tiesto más nuevo, mientras a ella la arrojaron al fondo del patio, junto al resto de cascos viejos. Pero ella aún conserva el recuerdo, y eso nadie podrá quitárselo jamás».

Hans Christian Andersen

¿OS HA GUSTADO?

No queríamos dejar pasar este hermoso cuento en este mes de Marzo, que estamos dedicando a LA TETERA, un mes en el que queremos que sea la protagonista, llenando nuestras Redes Sociales, con sus fotos y frases hermosas. Un mes donde nos viene la deseada PRIMAVERA, que mejor que vaya acompañada de nuestra querida TETERA y así, a la vez, también homenajeamos a nuestro nombre , con el que tanto deseamos extendernos y darnos a conocer, que nos vean todos y disfruten de lo que podemos aportarles, desde la sencillez, modestia y mucha, mucha ilusión, intentamos que encontréis SENSACIONES POSITIVAS a modo de sabores, de colores, de buen hacer, ojala estemos consiguiéndolo.

Hasta la próxima entrada, os esperamos, ser FELICES

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